Un baño histórico (1-4)

Imagen: LaLiga

El 13 de mayo de 2018 será recordado por todos como aquel punto de inflexión dado en pos de lograr la igualdad en el deporte, y más concretamente, en el fútbol guipuzcoano. Que mejor cita para llevarlo a cabo que en un derbi, en el primer derbi femenino disputado en Anoeta; aunque luego acabaría como acabó… (1-4).

Arrancó el partido y con él se calentó aún más si cabe el ambiente festivo en la grada. Calentita tenía que estar Mariasun al ver la pasividad de sus compañeras en los primeros compases del choque. Muestra de esa parsimonia fue la primera paladina ocasión del Athletic, en la que la zaga estuvo nefasta y dejaron demasiado espacio a Yulema Corres.

Despertaron las locales

El conjunto de Arconada fue de menos a más y comenzó a crear, a enlazar pases y a llegar con peligro al área rival. Todo esto sería inexplicable sin la figura de Manu Lareo, la más destacada en la parcela ofensiva junto a la pivote, Leire Baños.

El esfuerzo resultó ser en vano, viendo que en el minuto 23 el Athletic se adelantó por mediación de un autogol de Sandra Ramajo. Mazazo para las donostiarras que hizo mella en la actitud de ambos bandos.

Erika Vázquez se encargó de doblegar el marcador minutos después, indagando en la llaga producida por el primer tanto.

Vuelta al tajo

A la reanudación del encuentro, la tónica fue la misma de gran parte de la primera mitad: dominio de las leonas, y por consecuencia, sufrimiento de las realistas. Tal era el sufrimiento de éstas que, al no poder hacer su juego, estando encerradas atrás, llegó el 0-3, obra de Nekane Díez.

La Real estaba superada, y ya eran 4 los motivos que lo corroboraban. 0-4 y la cosa pintaba mal…No obstante, para tintar algo más de color azul el asunto, Chini Pizarro marcó el denominado «gol del honor». Minutos quedaban por delante, pero partido ya…

Final del partido y el luminoso indicada el 1-4 favorable a las visitantes. Histórico ya era el derbi de por sí, pero seguro que lo será aún más para el Athletic tras esta goleada. Perdurará en la retina de todos los allí presentes por mucho, mucho tiempo…