Ocho comensales gastan casi 50.000 euros en una cena en Madrid

La factura de la memorable cena que ocho empresarios llevaron a cabo en el restaurante Casa Parrondo, en Madrid, se ha vuelto viral debido a su desmesurado importe, 49.292 euros, iva incluido.

El festín comienza con dos kilos de angulas del Nalón, de cepa asturiana, a razón de 1.500 euros el kilo. 250 gramos la ración, una buena cazuela. Total: 3.000. Continúa con cuatro kilos de percebes de gran calibre, medio kilo por comensal. La broma sale a 150 euros el kilo. Y sigue con productos de mar: cuatro kilos de cigalas de anilla roja por un total de 6.000 euros, a precio de lingote. Cada comensal se mete además entre pecho y espalda una lubina a la sal a 30 euros la pieza y acaba la estomagada con carne, para romper el paladar: tres kilos de solomillo de buey por un total de 600 euros. De postre, un soufflé especial de 120 euros.

Y bien regado. Cuatro botellas de Flor de Pingus colección, el gran vino elaborado por el enólogo Peter Sissek, a 2.000 euros la botella. Y con espacio para las burbujas: champán francés, Louis Roderer, criado en el Valle del Marne y difícil de encontrar, a 15.000 euros la botella. Los empresarios se trasegaron dos botellas y también otra de whisky, Johnnie Walker, a 400 euros. Sumen además ocho gin tonics Hendrick’s (15 euros la copa) cuatro cajetillas de tabaco, cinco puros Romeo y Julieta y 16 cafés por 48 euros.