La Diputación Foral y Unicef recogen 223 aportaciones de estudiantes

Haurren Erabakia, el proyecto puesto en marcha por la Diputación Foral de Gipuzkoa en colaboración con UNICEF con el objetivo de fomentar la participación de las y los niños y adolescentes, continúa su andadura. La primera fase, que se ha desarrollado mediante los talleres de degustación, se ha llevado a cabo entre noviembre de 2017 y enero de 2018. Los objetivos de la primera fase han sido acercar a las y los niños los conceptos relacionados con la participación, crear un buen clima para el trabajo en grupo, motivar y crear interés en las y los niños y realizar una evaluación del proceso, en base a un criterio de mejora constante. Por tanto, el alumnado, profesorado y las personas encargadas de dinamizar los talleres han evaluado la primera fase y, en función de los resultados, se han realizado modificaciones en los siguientes talleres (talleres a nivel local y a nivel de Gipuzkoa).

Según ha dado a conocer el diputado de Gobernanza y Comunicación con la Sociedad Imanol Lasa, se han cumplido los objetivos definidos y se han recogido las opiniones, las aportaciones y las sugerencias de los 223 estudiantes participantes (105 niñas y 118 niños). En los talleres, las y los niños “se han sentido cómodos, han mostrado su deseo de participar y han indicado tener predisposición a continuar haciéndolo. Además, las sesiones de trabajo no les han resultado especialmente pesadas y al trabajar en buen ambiente el tema les ha suscitado interés. Por lo tanto, las y los niños han valorado la iniciativa de un modo muy positivo”.

Mediante esta primera fase se ha observado que las y los niños tienen cierto conocimiento acerca de la participación, pero gracias a estos talleres se ha conseguido profundizar mucho más en el tema. De todos modos, en función de las características de los municipios las y los niños entienden la participación de forma diferente. Por ejemplo, en las ciudades más grandes, como Donostia, Irun y Eibar, las y los niños relacionan la participación sobre todo con el derecho a pedir y a opinar. En Azpeitia tienen muy interiorizado el concepto de participación y lo ven como una actividad más del día a día. En localidades más pequeñas como Ataun, en cambio, ven la participación como un derecho, pero también lo relacionan con la responsabilidad individual de cada cual.

En cuanto a las y los dinamizadores, estos talleres han sido especialmente útiles para poder implantar mejoras en el resto de los talleres, es decir, para adecuar las dinámicas a los propios grupos y, de ese modo, lograr que la participación de las y los niños en el taller de los presupuestos sea lo más enriquecedora posible. En lo que respecta al profesorado, han confesado que la metodología aplicada en los talleres (los juegos y dinámicas) ha sido adecuada y atractiva. Gracias a ello, se ha cumplido uno de los objetivos: trabajar los conceptos novedosos para las y los niños. Asimismo, se han realizado actividades en grupo para fomentar la reflexión y la escucha activa. Desde el punto de vista de las y los educadores, lo más difícil para los niños y niñas ha sido entender e interiorizar algunos de los nuevos conceptos, pero una vez interiorizados los cimientos para los siguientes talleres han quedado establecidos.

Las próximas fases

Los talleres a nivel local y a nivel de Gipuzkoa ya están en marcha. Mediante ellos, las y los niños están reflexionando sobre su propio municipio y sobre los desafíos del futuro de Gipuzkoa. Partiendo de dicha reflexión, están trabajando diferentes propuestas que presentarán en los talleres de los presupuestos.

Por lo tanto, en los talleres de los presupuestos, y partiendo de las propuestas elaboradas, realizarán aportaciones concretas que presentarán a los Presupuestos Abiertos de la Diputación Foral de Gipuzkoa. “De este modo, la Diputación integrará las propuestas de las y los niños en su proyecto de presupuesto y tendrá en cuenta las opiniones de las y los niños en el diseño de las políticas públicas”, ha señalado Lasa. “Es fundamental tener en cuenta a las nuevas generaciones, nuestros niños, niñas y adolescentes, empoderándolos y tratando de garantizar su participación en las políticas públicas. Si el futuro queremos construirlo entre todos y todas, es evidente que tenemos que escuchar a quienes van a ser el futuro de Gipuzkoa. Con este proyecto extendemos el modo de trabajar de Etorkizuna Eraikiz a la infancia”.