Este lunes se han firmado la encomienda de gestión para construir a través de Euskal Trenbide Sarea la nueva estación ferroviaria de Astigarraga y el convenio de financiación de la pasarela que conectará la nueva infraestructura ferroviaria con el municipio guipuzcoano, y que dará acceso a la localidad al núcleo de Cercanías ferroviarias de San Sebastián (Irun-Brinkola), con el que hoy en día no tiene conexión. Además, el Gobierno Vasco ha adelantado que las obras para la construcción de esta estación comenzarán a finales de este año o principios del 2026.
Euskal Trenbide Sarea ha sacado a licitación en junio las obras para construir el edificio, que será rectangular y de una sola planta, situado sobre los andenes y las vías, con un vestíbulo de 420 m² que albergará los servicios para las personas usuarias. En la parte inferior, la estación contará con dos andenes laterales de 160 metros de longitud que se conectarán con el vestíbulo mediante escaleras fijas y ascensores.
A la nueva terminal solamente se podrá acceder a través de una pasarela peatonal y ciclista que servirá de conexión entre los términos municipales de San Sebastián y Astigarraga, separados en este punto por las vías del tren y el río Urumea. Esta pasarela tendrá una longitud de 306 metros y un ancho de 4,5 metros. La consejera de Movilidad Sostenible, Susana García Chueca, ha puesto en valor que la pasarela, además de servir de acceso a la estación, “se convertirá en una vía pública y conectará los términos municipales de San Sebastián y Astigarraga desde una orilla a la otra del Urumea”.