El País Vasco, a la vanguardia de la construcción con metodología BIM: nueve licitaciones y 230 millones de inversión durante el primer semestre del año

Crece el número de contratos públicos que exigen el uso de esta tecnología, entre los que destacan las obras de la infraestructura ferroviaria ‘Y Vasca’ o las promociones de VPO impulsadas por Visesa

La incorporación de la metodología BIM (Building Information Modeling) en las licitaciones públicas supone un avance importante para el sector de la construcción en el País Vasco, especialmente en proyectos estratégicos como la Y Vasca o las promociones de Vivienda de Protección Oficial (VPO) impulsadas por Visesa. Según los datos más recientes del Observatorio de licitaciones BIM de buildingSMART, en el primer semestre de 2025 se han registrado nueve licitaciones que requieren el uso de BIM, con un valor total que supera los 230 millones de euros, más del doble de los 82,5 millones invertidos durante todo el año 2024.

Pero ¿qué es BIM y por qué está revolucionando el sector de la construcción? Según explica Borja Sánchez Ortega, Director de Proyectos y Director del mejor máster BIM del mercado, el Máster BIM Manager Internacional (+IA y VR) de la consultora especializada Espacio BIM –www.espaciobim.com-, se trata de una metodología de trabajo colaborativo que “permite centralizar toda la información de un proyecto (geométrica, documental, etcétera) en un modelo digital desarrollado por todos los agentes que intervienen”. Este enfoque abarca también datos relacionados con materiales, costes, tiempos y rendimiento, lo que facilita la coordinación, planificación y gestión integral del proyecto, tanto en su fase de diseño como durante y después de la construcción física. Así, BIM es más que una herramienta, es una forma inteligente y colaborativa de gestionar proyectos desde su inicio hasta su mantenimiento, posible gracias al uso de diversos softwares BIM y garantizando la interoperabilidad mediante estándares abiertos, como el formato IFC.

Entre los proyectos más destacados en el País Vasco que exigen actualmente el uso de BIM se encuentra la Y Vasca, la infraestructura ferroviaria que conecta las capitales vascas mediante una nueva red de alta velocidad. En concreto, durante el primer semestre, Adif licitó las obras de construcción de catenarias en el tramo Vitoria-Bilbao-San Sebastián del AVE Madrid-Valladolid-Norte por un importe de 78 millones de euros. 

Otra iniciativa relevante es la apuesta de Visesa, sociedad pública del Gobierno Vasco, por integrar BIM en la planificación y ejecución de sus promociones de VPO. Se han licitado dos contratos públicos por un importe total de 30,61 millones de euros. Esta implementación permite una mayor eficiencia en la gestión de recursos públicos y un control más preciso de los proyectos residenciales, desde su diseño hasta la fase de mantenimiento, facilitando a las encargadas de estas obras una mejor planificación y ejecución bajo esta metodología.

Otra iniciativa destacada es la apuesta de Visesa, sociedad pública del Gobierno Vasco, por incorporar la metodología BIM en la planificación y ejecución de sus promociones de VPO. Actualmente, se han licitado dos contratos públicos por un importe total de 30,61 millones de euros. Esta implementación mejora la eficiencia en la gestión de los recursos públicos y permite un control más preciso de los proyectos residenciales, desde el diseño hasta la fase de mantenimiento, facilitando a las constructoras una planificación y ejecución más efectiva.

Ahora bien, la licitación más cuantiosa de este primer semestre se adjudicó a Euskal Trenbide Sarea, la entidad pública responsable de los proyectos ferroviarios en el País Vasco, por valor de 108 millones. Este gestor lleva varios años inmerso en un proceso de implementación de la metodología BIM.

Estos avances confirman que el uso de tecnología ya no es una opción, sino un requisito cada vez más habitual en las licitaciones públicas, especialmente en territorios como el País Vasco, donde la innovación y la sostenibilidad son pilares fundamentales en la planificación urbanística y de infraestructuras.

Con la mirada puesta en el segundo semestre del año, todo apunta a que la presencia de BIM seguirá creciendo, consolidando una forma de trabajar más colaborativa, digital y eficiente para todos los agentes del sector.