10 hábitos para ser felices

La empresa Conservas Olasgasti, líder en el sector de la comida saludable, ofrece consejos para lograr un vida feliz siguiendo hábitos saludables.

Se puede decir que ya todas las ciencias han estudiado la felicidad y la búsqueda la misma. Es el principal deseo de la mayoría de la gente.

¿Qué nos hace felices?

Pues a cada uno le hará una cosa diferente, obviamente. En lo que sí se ponen de acuerdo muchos estudios científicos de distinta índole es en las acciones que nos ayudan a serlo.

La empresa Conservas Olasagasti trata de llevar a cabo esta búsqueda entre sus trabajadores y sus clientes, una gran familia cuyo objetivo es la búsqueda de momentos especiales, saludables y felices mediante una filosofía de vida y de trabajo que persigue sentirse mejor.

Ya saben que no es un estado permanente. Cada día tiene sus altibajos, sus problemas, sus baches o sus tragedias.
Pero desde Olasagasti aseguran que nuestra actitud será determinante para lograr ser una persona (muy) feliz.

10 HÁBITOS PARA SER FELICES:

1. Hacer deporte: Está demostrado, el ejercicio habitual –cada uno en la medida de sus posibilidades- es un aliado demostrado contra la depresión a largo plazo. Y a los que no están deprimidos, un poco de deporte diario (basta una caminata larga) les ayuda a afrontar el día con positivismo y mayor satisfacción que los que no se mueven nada.

Además de mejorar el bienestar físico y psíquico, después de realizar ejercicio moderado uno se encuentra mejor, más relajado y en paz consigo mismo. Despeja la mente y aclara las ideas.

Para Olasagasti siempre ha sido un punto primordial y está presente en diferentes actividades deportivas apoyando a equipos o personas que han apostado por una vida volcada en el deporte –profesional o no-.

Y si ya lo hacemos en plena naturaleza, cerca del mar o nos zambullimos en él, se multiplican los beneficios. Así pasamos al siguiente punto.

2. Pasar más tiempo al aire libre y, si nos rodeamos de “verde”, mejor. Vivir o pasar un día entre vegetación nos da serenidad y nos induce a reflexionar. El buen tiempo también nos afecta a la mayoría: el sol propicia el buen humor y encima nos aporta Vitamina D.

3. Calidad de vida: Realiza pequeños gestos que no son muy costosos pero que te llenan de felicidad: practica la lectura, escucha música, acude al cine o al teatro, admira una exposición o un jardín, tómate un café o un té con calma, acude al trabajo caminando (un lujo, lo sabemos) o en bicicleta; come tu picnic en un parque en soledad o con alguien con quién nunca consigues quedar ; y busca ratos para no hacer nada (véase: descansar, contemplar, remolonear, gastar una mañana de domingo en pijama, redesayunar, perder la mirada en el mar o en el fuego).

4. Alimentarse bien: Cada vez está más demostrado que una alimentación saludable y equilibrada nos da la energía y fuerzas necesarias para afrontar el día a día por gris que se nos presente.
Además, proporcionar al organismo de todos los nutrientes, vitaminas y hierro que necesita, hará que nuestro cuerpo y nuestra cabeza funcionen mejor.

Acudir a alimentos frescos y conservas de calidad (tratando de evitar los refinados, los aditivos y los colorantes) proporciona salud y calidad de vida con todo lo que ello conlleva.

Combinándolo con el ejercicio diario, nuestra vida será mucho más feliz. Hacerlo con nuestros seres queridos y utilizar la alimentación para celebrar las alegrías –sin abusar del alcohol- aumenta el bienestar y la felicidad.

5. Dormir más y mejor: Está claro que cuando no dormimos lo suficiente estamos de mal humor. El cansancio tiene muchos efectos negativos como influir en las decisiones erróneas que podamos tomar durante ese día.
Es importante descansar bien, cuidar las posturas en las que lo hacemos, nuestros colchones y las almohadas, tan olvidadas muchas veces.

6. Amar, pasar más tiempo con los amigos y la familia. Qué fácil es decirlo! Sin embargo, no os parece que cada vez tenemos menos tiempo para nuestros seres queridos y más para el ordenador, el trabajo, las gestiones, el móvil o, simplemente, nuestro ombligo?

Interactuar con los que nos aprecian y apreciamos influye muy positivamente en nuestro estado de ánimo. Tener amigos y reservarnos varias horas a la semana para estar con nuestros seres queridos nos da felicidad.

7. Ser flexible, asumir las situaciones difíciles o traumáticas y sobreponernos a ellas amoldándonos a las nuevas circunstancias y necesidades. De este modo podremos luchar contra las adversidades y al mismo tiempo ello nos hará crecer y desarrollar al máximo nuestro potencial.

No existe una vida dura, sino momentos difíciles. En psicología se denomina resiliencia.
8. Meditar: Todos deberíamos buscar momentos de recogimiento. Encontrar ese rato para reflexionar sobre nuestra vida, nuestras decisiones, nuestros actos para intentar crecer como personas y dar lo mejor de nosotros. Para conectar más con nosotros mismos y con el mundo que nos rodea. Sin duda, lograremos mucha mayor felicidad.

Y nos resultará más fácil el siguiente punto:

9. Sonreír: sí, no es baladí. Sonriendo a los que nos rodean nos proporciona bienestar a nosotros mismos e, incluso, a los demás. Prueba a responder a una frase violenta o una mala cara con una sonrisa: ayuda a apaciguar conflictos y a convivir con más alegría.
Eso sí, sonrisas sinceras, las que surgen de pensamientos positivos.

10. Dar las gracias. A todas horas (bueno, sin pasarse), siempre hay motivos para sentir gratitud a la vida, a las personas que nos rodean. Expulsar un “gracias” es como un soplo de aire fresco, nos relaja, nos puede hacer sonreír, dormir mejor, digerir mejor.
En suma, ser más felices.

Para más información sobre productos de alimentación saludable, sólo tienes que visitar su web www.conservasolasagasti.com.