Los escolares de Gipuzkoa podrán convertir máquinas expendedoras de tabaco en cajas-nido

El objetivo de la campaña es promover entre los escolares gipuzkoanos la reutilización de materiales mediante la bioconstrucción aprovechando estas máquinas expendedoras cuyo destino iba a ser la basura. La campaña ha sido diseñada por Fundación Cristina Enea en colaboración con la Sociedad de Ciencias Aranzadi y Kursaal Green, y se ha presentado en rueda de prensa este mediodía en el Ayuntamiento de San Sebastián.

Proyecto Txoriak: convirtiendo máquinas expendedoras de tabaco en cajas-nido

Se trata de “Txoriak”, un proyecto que pretende promover conceptos como la reutilización, bioconstrucción, educación y biodiversidad. Todo ello mediante unas cajas-nido muy especiales, que en realidad parten de unas máquinas expendedoras de tabaco, que una vez inutilizadas, han sido adaptadas para tal uso.

Para transformar las máquinas en cajas-nido hace falta un procedimiento que ha sido revisado por especialistas para que cumplan con los requisitos de habitabilidad de las aves que suelen anidar en este tipo de cajas.

El proceso comienza con el vaciado de la mecánica que va alojada dentro de la máquina expendedora. Una vez extraida se procede a la adaptación tapando el orificio central con una pieza cilíndrica que permita entrar y salir a los pájaros. La parte superior se adapta con una ligera inclinación para que el agua de la lluvia caiga hacia abajo. Todo el trabajo se realiza con materiales de bioconstrucción y se trata con barnices naturales para que puedan permanecer a la intemperie.

Las cajas con las que se confeccionan las cajas-nido pertenecían a un proyecto de que pretendía instalar máquinas en estancos y comercios de este tipo, y que ofrecían la posibilidad de comprar puritos por unidades. El proyecto no cuajó y decenas de máquinas fueron abandonadas, por lo que ahora se les da una nueva utilidad, vinculándolas a un proyecto ambiental.

Campaña escolar para observar la biodiversidad

“Txoriak”, que así se ha designado esta campaña, pretende promover entre el alumnado gipuzkoano varios conceptos como la reutilización, la educación, la bioconstrucción y el cuidado de la naturaleza mediante su observación. Por todo ello, se abre un periodo para que los centros escolares que lo deseen puedan participar en la campaña.

Cada centro educativo que participe contará con una caja-nido que podrá ser colocada en los espacios ajardinados del colegio. Tras su instalación toca la parte de espera a que pequeñas aves puedan acercarse a anidar. Para ello Fundación Cristina Enea ha creado, en colaboración con la Sociedad de Ciencias Aranzadi, un material didáctico que está disponible a través de la web de la campaña www.txoriak.com y que cualquier persona puede descargarse. Dicho material consta de:

– Un cartel donde se puede reconocer el tipo de ave que seguramente anide en las cajas-nido.
– Un documento con consejos sobre instalación y cuidados de la caja-nido.
– Una ficha de seguimiento para que, tras observar el proceso de anidamiento, pueda quedar reflejado todo el seguimiento realizado por el alumnado.

Además se van a celebrar talleres didácticos impartidos en el Centro de Interpretación de Ulía que bajo el título “Sobre tu cabeza” los alumnos y alumnas podrán conocer características interesantes sobre las aves locales más comunes y su hábitat. Aprenderán a reconocerlas, y obtendrán material didáctico complementario.
Los escolares pueden llevar el seguimiento de la actividad de las cajas-nido a través de la web de la campaña donde dejarán reflejado todo el trabajo de seguimiento y lo compartirán con el resto de colegios y de internautas. La página, cuyo dominio es www.txoriak.com, alberga todo el material didáctico anteriormente descrito pero también geolocaliza las cajas-nido de forma que podremos conocer, en todo momento, donde están colocadas. Cada centro escolar dispondrá de un espacio en la web donde, a modo de noticias o posts, comentar y compartir cómo va desarrollándose el proceso de anidamiento.

La iniciativa también está abierta a que empresas o entidades puedan colaborar. Para ello se pondrán a su disposición cajas-nido para su apadrinamiento o amadrinamiento. De esta forma se podrán adaptar la totalidad de las máquinas que alcanzan las 80 unidades.