Familias de APNABI y psiquiatras especializados analizan la farmacología en el tratamiento del autismo

Más de 150 personas asociadas a APNABI Autismo Bizkaia han tomado parte en una jornada en la que se ha profundizado en el conocimiento sobre la farmacología y la medicación en el tratamiento del autismo y en la que han intervenido los psiquiatras de la Red de Salud Mental de Bizkaia de Osakidetza Juan Medrano, jefe de Servicio de la Comarca Ezkerraldea, y Ariane Arroitia, del Centro Salud Mental de Barakaldo.

La jornada, titulada “La farmacología en el autismo”, se enmarca en las actividades que se llevan a cabo en el AULA APNABI, un proyecto que tiene como finalidad promover la formación de las familias sobre las situaciones que afectan a las personas con trastornos del espectro autista (TEA) en las distintas etapas de su vida.

Esta jornada ha sido presentada por Mikel Pulgarín, presidente de APNABI, quien ha señalado que la medicación despierta una inquietud que es común en todos los padres y madres de personas con autismo.

Montserrat Clavero, responsable del Área de Consultas de APNABI, ha puesto de relieve que no existen fármacos que curen el autismo. “De hecho —ha indicado— la medicación no funciona por si sola, ni todo el mundo necesita ser medicado. El tratamiento de las personas con autismo —ha dicho— hay que iniciarlo con la atención temprana, los apoyos en materia de educación, vivienda y ocio y poner el objetico en lograr su inclusión plena en la sociedad”. Ha expuesto, en este sentido, que las encuestas realizadas en APNABI reflejan que el 22 por ciento de las personas con autismo en edad infanto-juvenil ha recibido atención farmacológica en 2016, con un incremento a partir de los 12 años de edad.

Juan Medrano, Jefe de Servicio de la Comarca Ezkerraldea de la Red de Salud Mental de Bizkaia, ha destacado que no existe un tratamiento farmacológico específico para los trastornos del espectro autista. Ha añadido que el hecho de que una persona tenga autismo no le exime de padecer otros problemas de salud mental y que quienes están cerca de ella deben conocer los beneficios, interacciones y efectos secundarios de los psicofármacos. En su opinión, la sanidad tiene un déficit en materia de tratamiento del autismo, que debiera subsanar, a pesar de la baja prevalencia de este trastorno.

Preguntado por lo que debiera hacer el sistema sanitario para facilitar la relación con los pacientes con autismo, Juan Medrano ha destacado un factor clave: la sensibilización de los profesionales.

Por su parte, Ariane Ariane Arroitia ha abordado los efectos secundarios de los psicofármacos y ha puesto de relieve la necesidad de mantener un estilo de vida acorde con el objetivo de lograr la salud.

El AULA APNABI es una iniciativa destinada a promover la formación de las familias de personas con Trastornos del Espectro Autista (TEA) y desde la que se abordan las situaciones que afectan a este colectivo en las distintas etapas de su vida. El proyecto se apoya en el conocimiento de técnicos y expertos en diferentes disciplinas, que intervienen en calidad de ponentes.