Donostia recurrirá la decisión del Consejo de Ministros de no autorizar la consulta sobre los usos de Illunbe

Conocida este pasado viernes la decisión tomada por el Consejo de Ministros de no autorizar la consulta popular sobre los usos que se le den a la plaza de toros de Illunbe, el Ayuntamiento donostiarra se ha pronunciado en una nota oficial en la que manifiesta su opinión y su agenda de actuación en seis puntos.

Ante la decisión del Consejo de Ministros de no autorizar la Consulta sobre los usos de Illunbe, el alcalde de Donostia Eneko Goia, quiere manifestar lo siguiente:

1- La decisión no nos ha sorprendido. Desgraciadamente era previsible y, lamentablemente, nuestra previsión se ha visto confirmada. Detrás de una argumentación pretendidamente jurídica, la decisión es inequívocamente política. No la compartimos, ni la entendemos y, por supuesto, la recurriremos.

2- Se nos antojaba difícil que una solicitud para celebrar una consulta ciudadana en Euskadi pudiera ser resuelta favorablemente por un Gobierno del Partido Popular, pese a que hemos seguido los cauces legales para ello.

3- Quienes creemos que la democracia es algo que se demuestra ejerciéndola, pensamos que en el siglo XXI los conflictos, los problemas, se resuelven escuchando directamente la opinión de la ciudadanía. ¿Qué interés tienen algunos partidos en que la ciudadanía no se pronuncie sobre una cuestión que en la calle genera opiniones contrapuestas?

4- En el caso de Donostia, la consulta sólo pretende dar la voz a las y los donostiarras para que se pronuncien sobre un asunto que es polémico en la ciudad y que provoca opiniones enfrentadas. No pretende, por tanto, manifestarse a favor o en contra de los toros, sino decidir sobre a qué vamos a destinar una instalación municipal como Illunbe, algo que a nuestro entender sí compete al Ayuntamiento.

5- El Gobierno del PP no quiere que demos voz a la ciudadanía en una cuestión que, al parecer, atenta contra no se sabe muy bien qué principios. Esto responde a una concepción más propia del siglo pasado, de una visión paternalista, de quien decide sobre qué cuestiones se pueden pronunciar las y los ciudadanos y sobre cuáles no. Nosotros pensamos que las y los donostiarras tienen derecho a dar su opinión y decidir a qué usos quiere destinar un recinto de ámbito municipal.

6- El Ayuntamiento va a estudiar qué otras vías existen para que las y los donostiarras, al igual que se hace en otros lugares del Estado, puedan manifestar su opinión sobre una cuestión que es de ámbito municipal. No entendemos por qué en unos lugares sí se puede preguntar a la ciudadanía sobre cuestiones municipales y, sin embargo, en Donostia se prohíbe.