La Diputación Foral de Gipuzkoa co-financiará la conexión de la zona industrial de Errotaberri, en Zarautz

El Consejo de Gobierno ha aprobado el convenio a firmar entre la Diputación Foral y el Ayuntamiento de Zarautz para la ejecución y financiación de las obras del proyecto de urbanización del sector industrial Errotaberri. Acorde con el mismo, la institución foral costeará parcialmente las obras del apartado denominado Frantsesbidea, en los capítulos que afectan a materias de su competencia, por un importe de 1.243.026,59 euros. Además, se compromete a poner a disposición los suelos necesarios durante la ejecución de las obras. El Ayuntamiento, por su parte, asume la responsabilidad de la contratación y la ejecución de las obras.

Se trata de un proyecto redactado en 2017 por el Ayuntamiento, con cinco fases. Las tres primeras están ya en ejecución y la cuarta se espera acometer en breve. El desarrollo de la quinta y última fase, que es a la que se refiere el convenio aprobado hoy, cuenta con un presupuesto total de 1.892.371,97 euros, y un plazo de ejecución de 16 meses. Las obras correspondientes a Frantsesbidea, comprenden la conexión de Errotaberri con el casco urbano en Aritzbatalde a través del paso existente sobre la autopista, la renovación del cajón de Frantseskoa y la conexión con el camino de Aitza auzoa, así como la eliminación de la glorieta Arizia y su sustitución por una intersección en T.

Según ha destacado el portavoz foral Imanol Lasa, estas actuaciones permitirán mejorar la conexión del polígono industrial Errotaberri con la red viaria general, “evitando que ese tráfico deba atravesar el casco urbano”. Actualmente, desde la rotonda de conexión de la N-634 con la AP-8 hay que tomar la calle Zubiaurrezar y recorrer las calles Araba y Urdaneta hasta pasar bajo la autopista. “Supone reducir el recorrido de los vehículos que van a Errotaberri por la zona urbana, muchos de ellos pesados, en 800 metros, por lo que conllevará una mejora considerable en la movilidad del municipio, aliviando el casco urbano, y repercutiendo positivamente en la calidad de vida de las vecinas y vecinos”, ha indicado.

El objetivo común de mejorar los accesos al polígono industrial Errotaberri aprovechando las sinergias generadas con la mejora de la situación del río Iñurritza, ha guiado tanto al Ayuntamiento como a la Diputación Foral a redactar este convenio, apostando por la “colaboración institucional”.  Se trata de una obra de “gran importancia” para consolidar el futuro de Zarautz también en lo económico, ya que permitirá ampliar y desarrollar la actividad industrial, hasta ahora centrada básicamente en Abendaño, que está “al borde de su capacidad”. También beneficiará a las trabajadoras y trabajadores de esta zona industrial.

Además, las obras sufragadas en esta quinta fase coinciden con actuaciones recogidas en los proyectos de variante de la carretera N-634 redactados por la Diputación Foral con anterioridad, “actuaciones que si ejecutamos ahora, no será necesario realizar cuando se aborde la construcción de la separata de la variante de la N-634. Es, por tanto, un adelanto de trabajos ya previstos y un primer paso”. Se cumple así el compromiso anunciado por el diputado general Markel Olano en su visita institucional a la localidad costera en 2017.

Importante inversión en la N-1

Por otra parte, el Consejo ha dado el visto bueno  al proyecto para la rehabilitación estructural del firme de varios tramos de la N-1 comprendidos entre los p.k. 424,070 – 435,130 en el sentido Vitoria-Irun y entre los p.k. 422,450 – 425,320 en el sentido Irun-Vitoria, con un presupuesto total de 1.819.561,55 euros, y un plazo de ejecución de tres meses. Estos tramos tienen una capa de rodadura de cierta antigüedad, que ha sido reparada en numerosas ocasiones mediante reparaciones localizadas,  pero precisan de una actuación de mayor alcance que mejore su estado al estar especialmente afectados, una actuación “muy demandada” además en los últimos meses por las usuarias e usuarios de esta carretera.

Concretamente, en dirección Gasteiz se actuará en los tramos Arama-Ordizia y Legorreta-Itsasondo, y en dirección Irun, en los tramos Itsasondo-Legorreta, Legorreta-Ikaztegieta y Alegia-Tolosa. Lasa ha recordado que el invierno ha resultado especialmente “duro” por el volumen de lluvia, y por la nieve, con el consiguiente impacto de la sal sobre el firme. Los trabajos se ejecutarán en verano, por el clima, y aprovechando el periodo vacacional para minimizar las afecciones en el intenso tráfico de esta carretera, que registra el paso de miles de vehículos al día, muchos de ellos camiones –la IMD diaria a la altura de Tolosa es de casi 36.000 vehículos-.

El portavoz ha destacado que el mantenimiento y la mejora de la N-1 es “una prioridad” para el gobierno foral en la gestión de las carreteras, a la que se destina una inversión “de gran magnitud”, y que ha motivado la puesta en marcha del sistema de cobro AT para vehículos pesados. Desde 2015 se han destinado a la rehabilitación del firme 7,5 millones de euros, a los que hay que sumar otros 7,5 millones si se tienen en cuenta las actuaciones de prevención y conservación ordinaria.

El objetivo de las actuaciones aprobadas hoy es aumentar la capacidad estructural del firme existente, adecuándola a las acciones del tráfico previsto durante su periodo de servicio y mejorar su seguridad y comodidad, así como proteger el conjunto en términos de durabilidad, impermeabilidad y uniformidad. El proyecto incluye actuaciones previas al refuerzo del firme, consistentes en la reparación del pavimento actual en el carril exterior mediante su eliminación por fresado profundo y la extensión posterior de una capa de mezcla bituminosa de 6-10 cm. de espesor con el fin de dotar una mayor capacidad estructural a este carril ya que soporta la mayor parte del tráfico pesado. Posteriormente se contempla la extensión de  la capa de rodadura en toda la anchura de la plataforma.

Además, en las cinco estructuras existentes en los tramos mencionados, se prevé realizar el fresado superficial y la extensión de la capa de rodadura, así como la reparación de las juntas de dilatación. Por último, el proyecto incluye reponer la señalización horizontal en la totalidad de los tramos afectados.

 

Economía circular

Por último, se ha acordado conceder al centro de investigación Tecnun una subvención directa por importe de 19.950 euros para el desarrollo de la investigación sobre el estado de las empresas guipuzcoanas respecto de la economía circular. Este centro viene trabajando hace tiempo en la línea de integrar la economía circular en las empresas y va a continuar con esa actividad investigando su grado de implantación en el tejido económico guipuzcoano. Para ello, en primer lugar, revisará las mejores prácticas en consonancia con la metodología y directrices de la Comisión Europea. Seguidamente, tendrá en cuenta los indicadores más adecuados y elaborará un modelo de diagnóstico a partir del cual desarrollará una herramienta que aplicará a la realidad guipuzcoana para conocer la situación de sus empresas.

El diagnóstico se realizará primeramente con un pequeño grupo de empresas y, posteriormente, se ampliará su uso a otras, con el objeto de conseguir una representación de todos los sectores para, finalmente, identificar la situación actual del territorio en relación con este “reto de futuro”. “Las empresas guipuzcoanas tienen que ir adaptándose a esta nueva realidad e implicándose en esta apuesta, por su potencial de mejora ambiental y económica, pero antes es necesario conocer en qué situación están”, ha afirmado Lasa.

Frente al modelo económico lineal, consistente en extraer, fabricar, consumir y desechar, la Diputación se ha marcado como objetivo impulsar la transición hacia “un nuevo modelo basado en el uso eficiente de los recursos, inspirado en la naturaleza, en la que todo se aprovecha en un proceso cíclico. Una economía basada en un uso más eficiente de los flujos materiales, una minimización de los residuos y la simbiosis entre empresas”, ha finalizado.