Un chalé incendiado en Castiello de Jaca por cuatro menores, tres de ellos guipuzcoanos, va a costarle a sus padres un total de 557.563 euros.
Los jóvenes, que cuando se produjeron los hechos tenían entre 14 y 17 años, accedieron al chalé por la puerta trasera, que estaba rota, aprovechando que el dueño no se encontraba en el inmueble. Una vez dentro, rompieron la puerta de la bodega, donde fumaron y abrieron varias botellas de vino. Posteriormente, en el salón, echaron gasolina en un vaso de cristal y le prendieron fuego, lo que causó una gran llamarada de fuego. El grupo intentó extinguirlo de varias maneras, de las cuales ninguna tuvo éxito.Ante esto, los menores decidieron abandonar la casa, que acabó en llamas.
Ahora los cuatro jóvenes han sido condenados por un delito de allanamiento de morada y otro de daños por imprudencia grave, pero su condición de menores hará que sean sus padres quienes afronten la deuda.
