Suprimirán 123 obstáculos en los ríos para mejorar la accesibilidad de las especies piscícolas

La Diputación de Gipuzkoa ha presentado el Plan Director de Permeabilización de Obstáculos de Gipuzkoa, que establece las prioridades en función del beneficio ecológico y define las actuaciones a medio y largo plazo, después de dos décadas de intervenciones puntuales.

Actualmente, sólo el 19 % de la longitud total de los ríos guipuzcoanos, equivalente a unos 162 kilómetros, es accesible para los peces, ya que existen del orden de 750 obstáculos, como centrales, presas, represas y azudes, que impiden a las especies migratorias remontar las aguas desde el mar.

La ambiciosa planificación foral pretende multiplicar por tres esas cifras en un periodo de 16 años, eliminando o haciendo accesibles con escalas o rampas laterales un total de 123 obstáculos, hasta recuperar el tránsito piscícola en 365 kilómetros más y conseguir para el año 2034 que el 60 % de los cauces quede libre de barreras.

Las actuaciones planeadas se harán sobre todo en los cursos y afluentes principales de los ríos Urumea, Oria, Urola y Deba, que son los que menor accesibilidad presentan, en menor medida en el Oiartzun, que ya es permeable para los peces en la mayor parte de su cauce, y ninguna en el Bidasoa porque ya no tiene barreras.