El fotógrafo donostiarra Kote Cabezudo, procesado por presuntos abusos a modelos, estafa y otros delitos contra la libertad sexual, ha sido condenado a cinco meses de prisión y a una multa de 1.500 euros por falsificar unos contratos para simular que una de sus modelos era mayor de edad.
No obstante, la resolución lo absuelve debido a que este delito ha prescrito. En caso de que los documentos se confeccionaran en los años 2008 y 2009 o, en todo caso, con anterioridad al 11 de febrero de 2010, cuando el acusado entregó los contratos falsos a la causa judicial ya habían transcurrido los tres años determinantes de la prescripción», según la legislación vigente en aquel momento.
Esta condena se une a otra anterior, en la que Kote Cabezudo fue condenado a dos años y tres meses de cárcel por tratar de intimidar a una testigo colgando en una red social una fotografía suya desnuda.
