La Guardia Civil ha identificado en Cantabria, gracias a un sistema de posicionamiento de los barcos durante su estancia en el mar denominado AIS, al barco que presuntamente abandonó un tramo de unos 700 metros de red de cerco que fue recuperado el pasado 19 de octubre a la salida de la bocana de la dársena del puerto de Pasaia, donde se había quedado trabada.
Las investigaciones llegaron a determinar que el pesquero ahora identificado sufrió un percance con la red cuando quedó enganchada en unas rocas, lo que le llevó a abandonar una parte de la malla. De hecho, llegó a pedir ayuda a una segunda embarcación por lo ocurrido. El gran error fue no comunicar este hecho a las autoridades para que la red abandonada hubiera podido ser recuperada con seguridad, sin convertirse en una trampa mortal para la fauna marina.
Por ello, la Guardia Civil denunciará a los responsables del pesquero ante el Gobierno Vasco y los propondrá para una sanción administrativa.
