Estas son las condiciones que deben cumplir tus neumáticos si quieres pasar la ITV

Si este año te toca pasar la ITV, no dejes de revisar el código de velocidad de tus neumáticos. Te contamos lo que tienes que tener en cuenta para evitar sustos en la próxima revisión de tu vehículo.  

 

Ojo con no tener en regla todos los papeles y documentos de tu coche, porque el despiste puede salirte muy caro. Concretamente, entre los 6.000 y 12.000 euros de multa. Antes de acudir a la Inspección Técnica de Vehículos (ITV) te recomendamos tener en cuenta todos los detalles y las partes a revisar en tu coche, especialmente sus neumáticos.

 

Para muchos conductores, hay un elemento que suele pasar desapercibido y que puede provocar el suspenso de la Inspección Técnica de Vehículos. Estamos hablando del código de velocidad grabado en la goma de los neumáticos. Estos dígitos representan las capacidades y dimensiones de las ruedas y su letra final puede ir desde la A hasta la Y. 

 

Cada tipo de vehículo tiene su propio código que señala la velocidad máxima que puede alcanzar el modelo de ciclomotor en concreto. Por norma general, los vehículos que cuentan con neumáticos de serie, no presentan ningún problema, las pegas vienen cuando hemos repuesto nuestros neumáticos y no hemos consultado al profesional de turno cuál es el más indicado para no tener problemas durante la inspección de nuestro vehículo. 

Desde la Dirección General de Tráfico (DGT) advierten que está completamente prohibido instalar neumáticos de códigos inferiores a los que vienen indicados en el modelo de vehículo en particular. Por norma, esto está especificado en la ficha técnica del vehículo. Así, si tienes que pasar la ITV próximamente, es muy oportuno que revises si el código de tus neumáticos corresponde con el de su ficha técnica.

¿Tienen los neumáticos fecha de caducidad?

 

Existe la creencia de que, cuando un neumático tiene cierto tiempo de antigüedad, este deja de ser utilizable. Sin embargo, esta afirmación no es cierta. Muchos clientes dan importancia al hecho de que la fecha de fabricación sea reciente, pero esto no tiene nada que ver con que el neumático en cuestión ofrezca las mejores calidades. ¿Por qué sucede esto?

 

Si un neumático ha sido fabricado y almacenado en buenas condiciones, ofrecerás las mismas condiciones, independientemente de que hayan pasado 2 meses o 2 años. Los neumáticos no tienen fecha de caducidad, siempre y cuando se mantengan en óptimas condiciones, esto es: sin incidencia de luz solar, sin cambios bruscos de temperatura, etc. 

 

Cuando un neumático no ha sido correctamente almacenado, puede perder sus propiedades, endureciéndose y descendiendo su capacidad de agarre y adherencia. En estos casos no debería exceder los 5 años de antigüedad. Desde el año 2006 es obligatorio que los fabricantes de neumáticos estampen en un código, la semana y el año de fabricación de sus neumáticos. De esta manera, al usuario no le quedará ninguna duda antes de adquirir las nuevas ruedas de su vehículo.

 

La mayoría de veces pensamos en las características de nuestro coche, en su diseño, potencia o equipamiento. Pero, lo cierto es que nada de esto tendría ningún valor si no contamos con un modelo de neumáticos apropiados que consiga que nuestro vehículo alcance la trayectoria indicada y, en consecuencia, nos permita llegar a nuestro destino sanos y salvos. 

El mundo de los neumáticos es muy amplio y en este sector entran en juego una gran cantidad de variables. Los neumáticos son los grandes protagonistas de nuestro vehículo y aseguran que este cumpla con las condiciones de seguridad y confort necesarias. Por tanto, es fundamental realizar su cambio cuando llega el momento. No solo para evitar sustos en la ITV, sino para mejorar nuestra seguridad y el funcionamiento óptimo de nuestro vehículo.